14/10/07

modelando el espacio...

Un día me voy a despertar y voy a descubrir que soy otro. No, no una mariposa. Voy a tener el mismo cuerpo, voy a dar los mismos pasos y haré las mismas cosas. Pero no me sentiré como yo mismo. Tendré puesto un traje de yo mientras que por dentro soy no yo o yo otro o simplemente un traje de yo. Me encontraré dentro de estas cuatro paredes y no cabré dentro de ellas. Buscaré hasta en el más recóndito rincón una salida para este traje. Una rasgadura, un agujero por donde pueda sacar la sustancia que llevo dentro. Ni siquiera sabré lo que estaré haciendo porque no sé lo que estoy diciendo.

Ese día es hoy. O lo fue, porque se está acabando ya, faltan cuarenta minutos y el día se habrá ido por el drenaje. Me encuentro en un estado de perfecta tranquilidad. Hay muchas cosas que debo hacer, hay personas a las que debo ver y sobre todo quiero verte a ti. Te extraño tanto. Pero antes sé que debo hacer mil y un cosas que no me dejarán tranquilo en los próximos días. ¿Dónde estás? ¿Estás detrás de estos muros? Ojalá eso fuera cierto. Ojalá pudiera estirarme hasta tocarte y al menos rozar tu mejilla. Quisiera hacer el espacio a mi antojo y tenerte cerca. Pero no puedo, porque estoy confinado a una tabla de pendientes y a varios párrafos donde los segundos pasan con cuentagotas.

No tengo sueño, y eso que he dormido poco. El día tiene una velocidad que no logro definir porque la mañana se me fue en tres sandwiches y cuatro vueltas a la canción. Y estos minutos los traigo pegados a un costado y por más que me acomodo en la silla no se me quita la comezón que me causan.

He descubierto que no logro concentrarme en una sola cosa por más de treinta segundos. Eso sucede sólo los domingos. En nada, salvo en esto. Tenía muchas ganas de dormir una siesta de media tarde, pero media tarde no tuve, nada más una mañana excesivamente larga, y una noche igual. Mañana debo levantarme temprano. Y ¿dónde estoy? Estoy aquí dentro, rascándome, bebiendo agua, respirando en silencio y escribiendo con música.

Escucho el eco de tambores a lo lejos. Los traigo aquí dentro. ¿Por qué siempre hablo de ecos? ¿Y porqué de pescar si en mi vida he vuelto a un pez pescado? ¿Por qué siempre te hablo a ti y ni siquiera te he dicho que esto está aquí para ti? ¿Será que hablo conmigo mismo o con la imagen tuya que vive conmigo aquí dentro del traje? ¿Por qué hablo de trajes? ¿Por qué siempre hablo del día de hoy? Eso sí que lo sé. Sé que siempre hablo de hoy porque de mañana no te sabría decir nada. No es que no tenga planes para mi vida. Pero mañana, no tengo idea de qué sucederá. Sólo sé que mañana, como hoy, me gustaría estar contigo, y traerte dentro.

Terminaré por aceptar el traje que traigo puesto. Porque a fin de cuentas es mi propia piel. He descubierto que al hacerle una rasgadura el traje sangra. Así pues esto que traigo puesto es lo que verdaderamente soy. Me he dado cuenta hasta hoy por la mañana de que soy diferente. De que ya no soy el de antes. Y que el traje multicolor pasará a ser parte de mi nuevo atuendo, si no es que se ha consolidado ya desde hace no se cuánto.

Me lo dejaré puesto durante el día. Y durante la noche seré el durmiente desnudo que está en espera de un sueño que combine y un nuevo día donde brille el sol para que los colores que traigo puestos se reflejen y se vean hasta las ventanas de tu oficina. Me voy a dedicar a traerlo siempre limpio y disculpa si alguna vez lo mancho. Pero, no siempre se puede comer y quedar pulcro.

Saldré a caminar por las calles cuando estas paredes me liberen y te iré a visitar. Compraré flores, unas flores lindas. Tal vez iré en autobús, porque me gusta ver por la ventana mientras me acerco a donde sea que estoy yendo. ¿Te imaginas como he de sentirme mientras por la escena vitral veo pasar cosas que me acercan a ti? Es una emoción y un nervio que me hace sonreír. Sí, aún me pongo nervioso cuando sé que te veré. Y es probable que lo siga haciendo.

Hoy voy a decirte que esto está aquí. Si te he entregado ya mi mente, mi corazón, ¿porque no he de regalarte mis palabras? Si ya son más tuyas que mías, porque detrás de ellas estás y delante y de lado también. No importa por donde lo mires. Antes escribía letras que no se podían entender porque no iban dirigidas a nadie. Eran palabras que no importaba que se perdieran pues no iban con un destinatario. Eran una llana necesidad de despresurización de mi sistema. Pero ahora.. ¿qué te digo?

¿Cómo le hago si no así para decirte que te quiero? ¿Que te extraño? Y que ésta es mi manera de hacértelo saber porque con las otras soy bastante torpe.

Basta, no diré más. No por ahora. Porque estoy a cinco minutos de pasar a ser el de mañana y no quisiera perder toda esta memoria en la transición. Debo cortar, pero sabe que mañana naceré de nuevo y te seguiré queriendo. Y te seguiré esperando.

Hay varios insectos que están comenzando a hacer sus rondas nocturnas. Los insectos, compañeros también de aventuras ya contadas. Ya duérmanse, bichos. Porque yo estoy comenzando a quedarme dormido también. Es ahora cuando los achaques me forzan a recostarme un par de horas. Pero sé que falta poco tiempo, solo algunos minutos más. Y entonces mi traje de domingo se va al armario y comenzaré con el del lunes, y estará completamente limpio.

Hoy no me bañé, no tuve tiempo de hacerlo, y después no tuve ganas. Nunca creí que tocar a la fuerza, como hoy, fuera tan desgastante. Así fue el ensayo, una mera obligación. Ya te contaré después. Por ahora debo empezar una despedida fugaz, mis manos se vuelven de lunes, mi cabello y mis pies. ¡Hasta pronto! ¡Te llamaré! ¡Hay cosas que aun quiero decirte! ¡Pero el tiempo se me está acaban

Notas de fondo:

Air – Space Maker

12/10/07

Empieza con C

Hoy es el día CENEVAL. Y parece que de eso se ha hablado las últimas dos semanas. En cierta forma, me da gusto que ya sea hoy, pues el lunes ya tendré tiempo nuevamente para hacer mis cosas. Mucha suerte a todos. No me malinterpreten, no estudié para el examen. :)


Justo ahora salgo hacia la uni.

Notas de fondo:

Placebo - Without you I'm Nothing