31/12/07

Y en una hora, Enero...

Se me está empezando a hacer costumbre esto de no escribir. o mejor dicho, de no escribir aquí. Me he puesto a llenar servilletas y recibos de compra. Y todas esas cosas han ido a parar a los torbellinos de aire que circulan por la ciudad. Pero no importa mucho. Hoy quiero escribir aquí. Porque el año se está terminando. Y una nueva puerta se nos abre para ser mejores otra vez. Un nuevo comienzo. Aunque sólo es por fecha. Pues en realidad cada día nuevo es una oportunidad para hacerlo; para vivir de nuevo. Pero dejémoslo así.
Feliz año nuevo. Cumplan sus propósitos, para que se llenen de satisfacción.
Hasta el año próximo



notas de fondo:
- Radiohead - Videotape

30/11/07

En una hora ya es diciembre...

puff....tenìa casi un mes que no escribìa..

Tal vez deberìa estar durmiendo... peor como poder

dormir ante la duda? y con el inminente pasar de

los segundos. Porque biben podria en bonancibles

sueños disfrutar de un mundo que no es el que

vivimos todos los dias y olvidarem de las cosas.

Peor creo que eso no me dejaria tranquilo... no

puedo detenerme mientras veo el mundo pasar... yo

quiero ser parte de ese mundo.. vil, cruel, fugaz,

insensible... pero quiero estar ahi! quiero estar

enmedio de la accion! quiero hacer algo por los

demas y por mi mismo. Quiero que se escuche mi

nombre y quieor darle forma a ese nombre. No me

refieor a fama.. me refiero a reconocimiento... me

refiero a satisfaccion... lo que quiero para mi es

saber que puedo hacer las cosas.... quiero aprender

cosas nuevas... quiero oportunidad d emostrarme y

de aportar.. quiero dar forma a las

soluciones..quiero dar vida a cosas nuevas...aun no

defino como.. o cuando... aun no se què me llevarà

a ese sentimiento.. porque finalmente no tenog

ahora mas idea que la sensacion que ya he tenido

otras veces... pero que es tan rapida y tan

intangible...y que es tan adictiva....

No me importa tanto el titulo.... ni la

posicion.... o el puesto.... quieor concoer muchas

cosas... quiero ser simplemente una màxima idea de

lo que puedo ser.... de lo que ahora solo es eso,

una idea.. quiero proponer..innovar.... quiero

saber... y enseñar.. quiero compartir todo l que

soy.... y lo que puedo ser... no queiro ser

idolo.... no quiero ser famoso... o al menos no lo

que tenemos acostumbrado a creer como fama....



quiero ser yo... una vez que lo descubra... quiero

ser una eprsona confiable... una persona que sepas

que està ahi.... y quiero hacer, aunque suene muy

trillado, una diferencia ...independientemente del

lugar en el que estè....

me estoy abriendo puertas a caminos que puede que

ni tome.... pero creo que siempre es bueno tener la

sposibilidades abierta.s..porque quiero tener la

capacidad de elegir mi propio camino... si bien es

cieerto que en algun momento tarde o temprano

encontraremos nuestro destino.... siempr epodemos

elegir què camino podemos elegir...


aún hay muchasnubes dentro de mi cabeza.... aún no

defino nada.. ni mañana ..ni pasado.... pero no me

puedo dormir ahora porque si no las oportunidades

se me pasaràn...y ya tendrè tiempo.. ya me haré

tiempo... para definir por completo... o al menos

la idea general.de loq ue realmente quiero... y

poder separar verdaderos deseos de caprichos...y

poder distinguir mi vocacion de entre muchas otras

ideas.. que de alguna forma llegaron ahi...


mañana se define una puerta màs... aun no se si me

irè por ahi.. pero al menos me asomarè... a ver què

hay... voy a dormir.. el dìa va a ser largo....



de cualqueir forma estoy contento de haberte visto... te extrañaba.... la semana se me hizo muy larga aunque digas que estuvo corta.... te quiero... estoy muy contento..


notas de fondo:

explosions in the sky - your hand in mine

3/11/07

Tengo muchas, muchas, muchas ganas...

¡Dios! ¡Tengo tantas ganas de hablar contigo! ¿Qué estarás haciendo? Todo el día de ayer me sirvió para darme cuenta de que tú me haces feliz. Que extraño. Que rico. Que agradable el darme cuenta de que estás aquí dentro. Sé que no soy perfecto, sé que no soy una persona sobresaliente. No me estimo en menos pero soy bastante promedio y lo reconozco. Haré lo que pueda, lo que esté a mi alcance y más allà, todo lo que mis fuerzas me permitan para hacerte feliz. ¿Te digo un secreto? Hoy me dí cuenta de que tengo muchas ganas de amarte.


Te quiero, te extraño, si tan sólo llamaras....




notas de fondo:
Lifehouse - Everything

1/11/07

Alguien como tú

Después de tanto caminar por las calles, pensando, pensando; me di cuenta de una cosa. Tal vez suene un poco exagerado. No lo sé. Pero la verdad es que los sentimientos nunca se han medido por horas, ni por días. Me atrevo a decirte lo siguiente porque desde un principio quedamos tú y yo en ser francos.

No quiero a alguien que, como tú, me tenga pensando todo el día en ella. Alguien que, al igual que tú, me de fuerza para levantarme cada día. Que me haga sonreir y basten para ello los recuerdos.

No quiero a alguien que, de alguna manera muy parecida a la tuya, me haga querer ser mejor que ayer, que me revuelva las entrañas. Que me incite la mente y me la llene de curiosidad como si fuera un niño, pero me dé la determinación de un hombre.

Que me hiciera feliz con la manera en que sonríe; y que el amor que sienta por ella se externara y me hiciera más sonriente a mí también. Que me hiciese imaginar mil y un maneras de decir "te quiero"; así como tú lo haces.

Me costaría trabajo aceptar de lleno a alguien parecida a ti, que me ayudara a vencer mis miedos, que lograra hacerme querer compartir todo, hasta las cosas aparentemente más sencillas. Que le diese un nuevo sentido a la vida a diario, que me hiciera esforzarme, que me quitara el egoísmo, que sacara lo mejor de mí.

Aún cuando me pusiera el corazón a mil, y la cabeza a dos mil. Que me enamorara con sólo escuchar su voz, si su voz fuera como la tuya. Que me derritiera con la mirada. No, no quiero a alguien como tú, que me pusiera a escribir líneas como éstas. Tan raras y tan ciertas, que pueden sonar superficiales pero que son sinceras como pocas veces puedo ser. Que llenara las canciones, los momentos y los sentimientos. Que me hiciera querer conocerla a fondo.

¿Y que tal si me hiciera todo eso que tú haces? ¿Dilatara mis pupilas, me hiciese sudar las manos, segregar adrenalina a todo el torrente sanguíneo? Entonces ¿aceptaría? Probablemente no. Ni aunque sus besos fueran tan dulces como los tuyos, ni aunque fuera tan deliciosa como la deliciosa persona que eres. Lo más seguro es que la rechazaría.

Si tuviera la intención de hacerme aprender a amar la vida, las cosas, a mi mismo y, por supuesto, a ella. Aunque me hiciera sentir que puedo hacerlo todo, y que puedo tenerlo todo, que puedo lograrlo todo si la tengo a ella. No, correría, huiría de su lado.

No. Para mí, no quiero a alguien como tú. Te quiero a ti.




Notas de fondo:

Swade - Open up

14/10/07

modelando el espacio...

Un día me voy a despertar y voy a descubrir que soy otro. No, no una mariposa. Voy a tener el mismo cuerpo, voy a dar los mismos pasos y haré las mismas cosas. Pero no me sentiré como yo mismo. Tendré puesto un traje de yo mientras que por dentro soy no yo o yo otro o simplemente un traje de yo. Me encontraré dentro de estas cuatro paredes y no cabré dentro de ellas. Buscaré hasta en el más recóndito rincón una salida para este traje. Una rasgadura, un agujero por donde pueda sacar la sustancia que llevo dentro. Ni siquiera sabré lo que estaré haciendo porque no sé lo que estoy diciendo.

Ese día es hoy. O lo fue, porque se está acabando ya, faltan cuarenta minutos y el día se habrá ido por el drenaje. Me encuentro en un estado de perfecta tranquilidad. Hay muchas cosas que debo hacer, hay personas a las que debo ver y sobre todo quiero verte a ti. Te extraño tanto. Pero antes sé que debo hacer mil y un cosas que no me dejarán tranquilo en los próximos días. ¿Dónde estás? ¿Estás detrás de estos muros? Ojalá eso fuera cierto. Ojalá pudiera estirarme hasta tocarte y al menos rozar tu mejilla. Quisiera hacer el espacio a mi antojo y tenerte cerca. Pero no puedo, porque estoy confinado a una tabla de pendientes y a varios párrafos donde los segundos pasan con cuentagotas.

No tengo sueño, y eso que he dormido poco. El día tiene una velocidad que no logro definir porque la mañana se me fue en tres sandwiches y cuatro vueltas a la canción. Y estos minutos los traigo pegados a un costado y por más que me acomodo en la silla no se me quita la comezón que me causan.

He descubierto que no logro concentrarme en una sola cosa por más de treinta segundos. Eso sucede sólo los domingos. En nada, salvo en esto. Tenía muchas ganas de dormir una siesta de media tarde, pero media tarde no tuve, nada más una mañana excesivamente larga, y una noche igual. Mañana debo levantarme temprano. Y ¿dónde estoy? Estoy aquí dentro, rascándome, bebiendo agua, respirando en silencio y escribiendo con música.

Escucho el eco de tambores a lo lejos. Los traigo aquí dentro. ¿Por qué siempre hablo de ecos? ¿Y porqué de pescar si en mi vida he vuelto a un pez pescado? ¿Por qué siempre te hablo a ti y ni siquiera te he dicho que esto está aquí para ti? ¿Será que hablo conmigo mismo o con la imagen tuya que vive conmigo aquí dentro del traje? ¿Por qué hablo de trajes? ¿Por qué siempre hablo del día de hoy? Eso sí que lo sé. Sé que siempre hablo de hoy porque de mañana no te sabría decir nada. No es que no tenga planes para mi vida. Pero mañana, no tengo idea de qué sucederá. Sólo sé que mañana, como hoy, me gustaría estar contigo, y traerte dentro.

Terminaré por aceptar el traje que traigo puesto. Porque a fin de cuentas es mi propia piel. He descubierto que al hacerle una rasgadura el traje sangra. Así pues esto que traigo puesto es lo que verdaderamente soy. Me he dado cuenta hasta hoy por la mañana de que soy diferente. De que ya no soy el de antes. Y que el traje multicolor pasará a ser parte de mi nuevo atuendo, si no es que se ha consolidado ya desde hace no se cuánto.

Me lo dejaré puesto durante el día. Y durante la noche seré el durmiente desnudo que está en espera de un sueño que combine y un nuevo día donde brille el sol para que los colores que traigo puestos se reflejen y se vean hasta las ventanas de tu oficina. Me voy a dedicar a traerlo siempre limpio y disculpa si alguna vez lo mancho. Pero, no siempre se puede comer y quedar pulcro.

Saldré a caminar por las calles cuando estas paredes me liberen y te iré a visitar. Compraré flores, unas flores lindas. Tal vez iré en autobús, porque me gusta ver por la ventana mientras me acerco a donde sea que estoy yendo. ¿Te imaginas como he de sentirme mientras por la escena vitral veo pasar cosas que me acercan a ti? Es una emoción y un nervio que me hace sonreír. Sí, aún me pongo nervioso cuando sé que te veré. Y es probable que lo siga haciendo.

Hoy voy a decirte que esto está aquí. Si te he entregado ya mi mente, mi corazón, ¿porque no he de regalarte mis palabras? Si ya son más tuyas que mías, porque detrás de ellas estás y delante y de lado también. No importa por donde lo mires. Antes escribía letras que no se podían entender porque no iban dirigidas a nadie. Eran palabras que no importaba que se perdieran pues no iban con un destinatario. Eran una llana necesidad de despresurización de mi sistema. Pero ahora.. ¿qué te digo?

¿Cómo le hago si no así para decirte que te quiero? ¿Que te extraño? Y que ésta es mi manera de hacértelo saber porque con las otras soy bastante torpe.

Basta, no diré más. No por ahora. Porque estoy a cinco minutos de pasar a ser el de mañana y no quisiera perder toda esta memoria en la transición. Debo cortar, pero sabe que mañana naceré de nuevo y te seguiré queriendo. Y te seguiré esperando.

Hay varios insectos que están comenzando a hacer sus rondas nocturnas. Los insectos, compañeros también de aventuras ya contadas. Ya duérmanse, bichos. Porque yo estoy comenzando a quedarme dormido también. Es ahora cuando los achaques me forzan a recostarme un par de horas. Pero sé que falta poco tiempo, solo algunos minutos más. Y entonces mi traje de domingo se va al armario y comenzaré con el del lunes, y estará completamente limpio.

Hoy no me bañé, no tuve tiempo de hacerlo, y después no tuve ganas. Nunca creí que tocar a la fuerza, como hoy, fuera tan desgastante. Así fue el ensayo, una mera obligación. Ya te contaré después. Por ahora debo empezar una despedida fugaz, mis manos se vuelven de lunes, mi cabello y mis pies. ¡Hasta pronto! ¡Te llamaré! ¡Hay cosas que aun quiero decirte! ¡Pero el tiempo se me está acaban

Notas de fondo:

Air – Space Maker

12/10/07

Empieza con C

Hoy es el día CENEVAL. Y parece que de eso se ha hablado las últimas dos semanas. En cierta forma, me da gusto que ya sea hoy, pues el lunes ya tendré tiempo nuevamente para hacer mis cosas. Mucha suerte a todos. No me malinterpreten, no estudié para el examen. :)


Justo ahora salgo hacia la uni.

Notas de fondo:

Placebo - Without you I'm Nothing

4/9/07

260807

Una silla vacía en la habitación, y más nada. Es un departamento completamente abandonado. Donde sólo dejaron una silla blanca y las cortinas abiertas. La luz de la luna entra sincopada y el murmullo lejano de la gente que está ahora en la feria del lugar. Los reflejos de toda aquella vida entran también por la ventana. Tomo la silla y la recorro con las manos. Sus hombros son como los tuyos. Y miras hacia afuera. Lejos, más allá de donde está toda esa gente. Ha pasado tanto tiempo desde que te vi que no puedo recordar ya la cuenta. Pero ahora que estás, no importa cuánto tiempo he esperado. Tal vez estoy más viejo, más calvo, con menos fuerza. Tal vez soy menos diestro que antes. Me es más difícil concentrarme. Pero mi corazón sigue siendo fuerte. Los días en que no estuviste aprendí muchas cosas.

Aprendí que sólo basta recordarte para ponerme feliz. Aprendí que si lanzas las cosas con suficiente fuerza hacia el cielo podrán llegar a las estrellas. También me di cuenta de lo mucho que pesan las rocas en los bolsillos. Porque me la pasé coleccionándolas en todas mis caminatas. Pero que son aún más ligeras que los recuerdos. Pude desenmascarar a los fantasmas dentro de mi cabeza y sacarlos por la puerta trasera. Me hice un tatuaje con tu nombre. Es tan grande que empieza en mi cabeza y termina en mi vientre y cubre aún todo mi pecho. Encontré la cura para el aburrimiento. Grité y grité a través de mis manos hasta quedar afónico.

Quiero ir a la luna. Quiero estar ahí porque quiero ver qué hay del otro lado. Y también quiero ver cómo me veo desde allá. Quiero ver si las cosas que aquí parecen tan importantes tienen la misma magnitud cuando la gravedad es considerablemente menor. Quiero saber si cuando duermes en algún cráter sueñas lo mismo que cuando estás en tu propia cama.

Tienes el cabello más bonito y con mejor olor que he conocido. Quisiera olerlo siempre. ¿Cómo se construye un cohete? ¿Y cómo se le hace para que quepan dos personas con todo y sus maletas? Quiero llevarte conmigo para que conozcamos los Alpes Lunares. Anda, no desempaques nada y vámonos de nuevo. ¡Mira! Toma mi mano que estamos a punto de salir. Diez, nueve, comienza el conteo. Ocho, siete, el pulso se acelera y los nervios salen a relucir. Seis, cinco y cuatro, todo empieza a moverse y te tomo de la mano lo más fuerte que puedo. Tres, los ojos se me abren como platos mientras nos rodea una gran cantidad de humo. Dos, uno, no puedo esperar, ya quiero comer un gran plato de cereal y llenarlo en la vía láctea. Cero, y en mis oídos resuena el trueno y tiemblan todo mi cuerpo porque por fin hemos salido en este viaje. La tierra se va haciendo una esfera cada vez más pequeña y azul en un gran mantel color negro.

Desajustamos nuestros cinturones para poder flotar dentro de nuestro pequeño cohete de cartón. Y así tendremos por largos días aventuras interestelares antes de llegar a nuestro destino, La Luna.

Ya se le ve acercándose cada vez más, ya viene hacia nosotros. Buscamos un buen lugar para estacionarnos y mientras saco la mano por la ventana para sentir la arena y dejar líneas marcadas en el frío exterior. Abres la boca para exhalar y una nube tímida de vaho se escapa y se pierde tras nosotros como si estuviésemos dejando una estela, un recuerdo de nuestro viaje.

El paisaje es encantador, no hay nada. Nada que temer, nada que hacer a la fuerza, podemos sólo saltar alrededor y correr y cantar notas inaudibles en el vacío, pero que pertenecen a una canción que tú y yo sabemos, y por eso no es necesario que se escuche, porque el ritmo y la melodía de esta canción la llevamos dentro. ¿Te gustaría bailar? Te tomo de la cintura y con pasos torpes logro moverme un poco, te siento aquí conmigo, a miles de kilómetros de todo, de todo lo demás quiero decir, pues todo lo que necesito me está mirando dentro de un traje espacial. Ya tengo muchas ganas de besarte. Me acerco lentamente, y la distancia entre tu y yo se va haciendo más corta. Me inclino un poco, cierro los ojos. Ya casi. Y de pronto la cabeza se me va para atrás por el choque de nuestros cascos. No puedo evitar ruborizarme por no darme cuenta antes. Me quito los guantes, y libero el seguro a la altura del cuello. Allá sale la gran burbuja rebotando en cámara lenta por las dunas azuleadas. Tu turno. No tengas miedo, el aire es perfectamente respirable aquí.

Ahora sí, ya no hay más casco que me detenga. Y me lanzo de nuevo a la carga. Pero antes me detengo para verte más de cerca. Tienes una mirada tan dulce. ¿Cómo fue que no me di cuenta antes? ¿Cómo fue que me quedé callado tanto tiempo? Cualquier cosa que haya sido, me alegro que así haya sucedido, porque el viaje me fue preparando para este momento. Sonríe, déjame ver una vez más tu alegría en el rostro.

Espera un segundo, voy a volver rápido al cohete por las cosas. Abro la cajuela y saco de ahí la caña y el bote. Ahora estamos listos. Buscamos un buen lugar para sentarnos. Y ahora nos toca esperar a las orillas del Mar Frío a ver si pica algún pez lunar. He escuchado que son deliciosos con pimienta. La caña descansa inmóvil en el borde del bote y ambos miramos al horizonte que no cambia con el paso de las horas. Pero que encierra un misterio que es difícil de develar. El espacio empieza a tomar diferentes tonalidades, verde, azul y rosa. Y el ruido de fondo se escucha como murmullos de gente a lo lejos. Las estrellas se hacen más numerosas y brillantes. El fondo en general se hace más brillante, cómo si se estuviera viendo detrás de un cristal. Te abrazo fuerte. Entrelazamos los dedos. Algo pica. Y la caña comienza a moverse de manera periódica. El agua es tan clara que puede verse dentro de ella a un pez que tira con todas sus fuerzas. Poco a poco comienza a mover el bote en donde estábamos y se lo lleva. Se va alejando por el cielo.

Trato de alcanzarlo pero no puedo pasar a través del cristal que nos separa. Miro hacia abajo y veo los autos pasar. Se escucha más fuerte la música de carnaval. Y me encuentro con la silla. Pero algo ha cambiado en esta habitación. Allí estás tú en el umbral. Con una maleta al lado tuyo. Por fin estás aquí. Cruzo como un vendaval al otro lado para abrazarte. Bésame. Por favor que tu aroma ya me inunda y ya lo siento en mis pulmones. Vamos afuera. Hay una fiesta allá que nos está esperando. Vamos a ver qué nos aguarda bajo esa luz, esa música y sobre todo la esperanza que cada uno de nosotros alberga.

Cierro las cortinas. Salimos de la habitación y del departamento. Y todo queda de nuevo como estaba, la silla en medio de nada y la luz y la música en volumen bajo como arrullo para el cuadro. Nuestros pasos y risas a través de la escalera también resuenan mientras descendemos a la calle. Incluso el par de veces que estuve a punto de rodar hacia abajo por un descuido. Y el portón de enfrente que se cierra mientras nos alejamos del edificio hacia la noche de fiesta. Y nos tomamos de la mano mientras nos mezclamos entre la gente.
notas de fondo:
Bella Gleason - If I cannot go to the moon

29/7/07

Ideas

En las noticias pasaron el video de una gaviota que entra a uno de estos mini-supermercados y se lleva una bolsa de frituras. Según el encargado de la tienda, lleva haciendo esto por semanas. Pero imagino que eso es como una atracción para la tienda, y en consecuencia, una medida de mercadotecnia. Lo cual explicaría el hecho de que se haya tomado el video. No creo que alguien se la viva tomando videos de aves que entran por toda puerta de un establecimiento de este tipo. ¿Sería un tanto paranoico pensar que el dueño ha mandado a alguien a entrenar al ave hampona para subir las ventas de su local? En ese caso, tal vez debería yo hacer lo mismo, aunque dudo mucho que la gente crea que las gaviotas (inexistentes, por cierto, por mi rumbo) roben tornillos o focos para comerlos.

No me levanté tan tarde el día de hoy. Desperté como a eso de las nueve. No tenía ganas de leche, así que tomé un yogurt del refirgerador. Imaginen mi sorpresa, y mi expresión al probarlo cuando noto un sabor horrible en la boca. Resulta que el yogurt era de apio. Señores, por favor explíquen eso. ¿A qué clase de persona se le ocurre hacer un yogurt de apio? Y no solo contenía eso, sino betabel y nopal también. Extraño. No pude evitar tirarlo a la basura.

Hace unos días descubrí me levanté y no me sentía del todo bien. Se me había hecho tarde ya para el trabajo. Me miré al espejo, y descubrí la terrible verdad. Tengo un rostro de pocos amigos que me cuesta trabajo entender. Digo, sé que no soy la persona más amable. Pero de eso a que tu expresión lo grite es un abismo de diferencia. Evité verme el resto del día. Incluso yo mismo me dí miedo. Además, me sentía muy mareado. ¿Será posible que mi visión se haya dado a causa del mareo y el dolor de cabeza? Espero que sí, porque no tengo otro rostro. Así venía de fábrica. Afortunadamente, el día se fue haciendo mejor gracias a que me di cuenta de una cosa: Uno se siente tan mal o tan bien como uno quiere. Es decir, que si no dejamos de pensar en que estamos enfermos, seguramente nos sentiremos así el resto del día. Así que me propuse poner una buena cara el resto de la jornada y al parecer funcionó. Porque me sentí mucho mejor el tiempo restante. Independientemente de estar mareado o con dolor de cabeza, porque esas cosas no se fueron. Pero, más tarde hablé contigo. Y ya me sentía de maravilla. Y después de hacerlo, recordé sonreir.

Esto me recuerda a un día anterior. Estaba platicando con mi hermana (la menor), y de pronto le dio hipo. Si creen que el hipo es molesto cuando lo tienen, traten de mantener una conversación con una persona que lo tiene. Es realmente molesto. Exagero, no molesto sino que uno se distrae de las ideas porque se ven cortadas a cada rato. En fin, cuando logré concentrarme en lo que estaba diciendo, me di cuenta de que el hipo había desaparecido. Le pregunté cómo había logrado hacerlo desaparecer. Ella se limitó a decir - simplemente lo olvidé.-

El otro día iba cominando por la calle. En realidad estaba trabajando, pero eso no evita que camine por la calle. Noté que la pastelería de una cuadra abajo estaba sacando un líquido verde. Enseguida supe qué era. Era anticongelante. Esa gente debe ser ciega, o inconsciente. Si nunca han visto lo que le sucede a un auto que camina sin anticongelante, imaginen lo que sucedería con una pastelería. Es algo peligroso. Exhorto a los responsables del establecimiento a que tomen las medidas necesarias. No quisieramos que su pastelería se desbielara. O como sea que eso se escriba.

No pude dormir, bien. Desde siempre ha habido ruidos extraños en el pìso de arriba. No lo sé bien, pero estoy seguro de que hace más de un año... no, esperen.... antes de que entrara a la carrera el departamento de arriba pertenecía a la abuela de uno de mis conocidos. Pero ahora está desocupado. Creo. Porque todas las noches se oyen ruidos de gente que acomoda muebles, de pisadas, de esferas rodando por el piso. Gente que brinca, que corre y que se ríe. No sé qué haya allá arriba. No estoy sugiriendo nada. Sólo digo que no me dejan dormir muy bien.

He descubierto que el momento en que más se extraña la cama es el momento en que acabas de dejarla.

Mañana es lunes, el día más pesado de la semana. Pero quiero verte. Porque si no lo hago no tendré posibilidad de hacerlo sino hasta la próxima semana. No es que vaya a morir si no lo hago. Pero la verdad es que te extraño mucho.
Buena noche.

notas de fondo:
massive attack - teardrop
massive attack - live with me

18/7/07

y ni nadé al final...

Temo que durante el trayecto me dormí o creo que me dormí por ratos. Por supuesto no mientras yo manejaba, o soñé que manejaba. Algo así. Sería demasiado complicado tratar de explicarlo. Porque tal vez soñaba que estaba despierto, soñaba despierto o estaba completamente despierto. Así que no hay manera de saber qué tan verídica sea esta historia. O si se llevó a cabo del todo. El chiste es que entro a mi casa hace unos momentos y las ganas de escribir me invaden tan sólo para contarte lo que sucedió en esta cabeza.

El día de ayer me levanté temprano como habíamos quedado. Digamos que no tuve mucha opción. Me convencieron con la promesa de que nos quedaríamos en el mismo lugar que la vez anterior, un lugar con piscina. Conforme, empaqué mi traje de baño: el único que tengo. Salimos a las siete de la mañana. Aún era de noche. Atravesamos toda la Avenida Principal para salir hacia el norte. Aún no me despertaba por completo, solo veía cada uno de los postes de luz pasar una y otra vez y alejarse tras de la ventana lateral. Los veía irse por el espejo retrovisor, se hacían cada vez más pequeños. Llevé una gran dotación de música para que el viaje no se quedara sin banda sonora. Según tenía entendido, éste duraría alrededor de seis horas. Considerando la ida y vuelta, pues ya imaginarás mi mochila llena de discos. Porque no solo es llenar el tiempo, sino los diferentes estados de ánimo que se puedan presentar.

Quiero confesar que no recuerdo exactamente en qué momento amaneció. Pero estoy seguro de que terminé de despertar en cuanto sentí la primera punzada de hambre. Había olvidado desayunar antes de salir. El sol ya había salido. Llevaba ya un par de horas platicando con mi papá, no recuerdo exactamente de qué. Estaba acordándome de ti. Aún estaba atrapado en el día anterior, y en cómo soy tan torpe para sacar lo que quiero decir. Pero estoy muy contento, bueno, eso ya lo dije antes. Seguimos comiéndonos la carretera por un buen rato.

Uno puede notar que a lo largo del camino pueden verse varios señalamientos, no sólo sobre curvas, límites de velocidad y ubicaciones de teléfonos de emergencia. También están colocados los nombres de los pueblos cercanos. Es divertido de lo sencillos y obvios que son. Algunos ni siquiera tienen sentido, no para mí. Y cuando tratas de ver en dónde están estos pueblos te encuentras sólo con arbustos crecidos del tamaño de árboles que no dejan pasar. Entonces sólo te queda imaginar cómo vivirán esas personas aisladas de todo el mundo y lo que harán para rellenar el tiempo libre, que seguramente es mucho. Me pongo a pensar en mi mismo y creo que no podría vivir así, no lejos de todo, no lejos de la electricidad, el ruido y el plomo. O tal vez sí, tal vez sólo es cuestión de acostumbrarse, y estoy tan mal acostumbrado a esto que ahora me seríadifícil dejarlo; pero no imposible.

Irónicamente, una de las llantas hizo un sonido extraño. Como de estarse desinflando. Y se quejaba mientras el relleno se le iba saliendo con cada vuelta. Las rayas pintadas a lo largo del suelo fueron disminuyendo la velocidad y pude contarlas una a una. Nos hicimos a un lado de la autopista. El sol ya estaba en el punto más alto del cielo y la luna se escondía tras de una nube. ¡Que tímida es! La razón por la que nos detuvimos fue un tornillo atravesado en el neumático.Sacábamos lo necesario para cambiar la llanta agujereada. Logramos quitarla y mi papá me dijo que me quedara a cuidar la camioneta mientras él buscaba a alguien en el pueblo para reparar el asunto del tornillo. Se perdió en la maleza. Iba silbando, hasta que el silbido se hizo imperceptible. Nadie pasaba por la carretera. Estaba completamente desierta. Si me hubieran pedido describir el paisaje, diría que había una línea interminable de asfalto, con arbustos a los lados del tamaño de un hombre alto, punto. Ni señas de un teléfono de emergencia, un pozo, nada. Solo ese cuadro inmóvil, y yo en medio. Miré hacia la izquierda, nada. A la derecha, y de pronto estaba ahí un letrero verde con el nombre " La Terquedad". - Que nombre extraño para un pueblo - pensé. Escuché ruidos de nuevo entre las plantas, pisadas en el suelo. Era imposible que papá hubiera vuelto tan pronto. O al menos no creo haber estado tanto tiempo viendo la escena en la que me encontraba. Comencé a rodear la camioneta para ver qué cosa era lo que ocasionaba esas pisadas. De frente, izquierda, detrás. Y cuando volví a mi posición inicial encontré a un hombre tratando de colocar una biznaga en el lugar del neumático ponchado. Lo hacía con tal convicción que por un momento me quedé viéndolo, para ver si lograba hacerlo entrar. Estudiaba la forma, le daba vueltas. Se rascaba la cabeza. Se levantaba y se volvía a poner en cuclillas. Después de un momento refunfuñaba. No sé cuánto estuve ahí esperando a ver si se iba. Hasta que descubrí que si de él dependiera nunca se iría, o se iría con una biznaga a manera de neumático.

-Ehmm...buen día- dije - me parece que esa pieza no va ahí, señor-. El individuo volteó sólo para hacerme un gesto agresivo. Y siguió con su labor. Hablaba consigo mismo, quejándose de las personas entrometidas, del calor que hacía y principalmente de las biznagas que no entraban en los ejes de las camionetas. Una vez más me refería al hombre y traté de hacerlo entender, y con cada acercamiento el hombre se enojaba más. Y trataba de hacer entrar la planta con mayor fuerza. Le daba patadas. Gruñía, se acercaba al punto máximo de impaciencia. De pronto sacó un gran mazo de hule. Acomodó la biznaga por última vez. Tomó impulso y golpeó con toda su fuerza. Solamente vi cómo la bola espinosa se acercaba a una velocidad impresionante a mí. Me cubrí la cara con las manos.

Relámpagos. Me desperté mientras aún llovía afuera. La misma canción sonaba en el radio. Seguíamos nuestro camino por el carril de en medio. Sentí la primera punzada de hambre. ¿O la segunda ya? Decidimos detenernos en un paradero para comer algo. Seguimos platicando de mil y un cosas. Se veían pasar los coches iluminar las gotas de lluvia que seguían cayendo.Comimos mucho. Y nos subimos de nuevo a recorrer los kilómetros. Esta vez me tocó manejar a mí. Mi papá decidió acomodarse en el asiento del copiloto y comenzó a dormir.

Otro hubiera seguido concentrado en el camino, pero yo iba viendo todo lo que encontrara. Llegué a un letrero grande que decía "Trópico de Cáncer". Del lado izquierdo se erguía una especie de monumento o estructura que demarcaba el lugar específico por donde cruza esta línea terrestre. La escultura parecía la pieza central de una lavadora. Todo aquel que la haya visto sabrá a lo que me refiero. A la que hace chaca chaca y da vueltas y regresa como si estuviera tartamuda. Me dieron muchas ganas de detenerme, pero habíamos perdido mucho tiempo ya en el cambio de la llanta, y, dado el mal temperamento de la gente de por ahí, no imaginaba cómo podrían reaccionar si se enteraran de que soy Acuario. Pasamos de largo.

Faltaba aún un buen tramo. Creo que debe haber pasado media hora cuando alcancé a ver a lo lejos un gran árbol. Había gente saltando pero no lograba alcanzar sus ramas. Había algo entre sus hojas que brillaba con el sol. Y luego muchos destellos se hicieron visibles. Aún así llovía, como esos días soleados de lluvia; de esos que suceden cuando, según dicen, alguien muere. Cuando me acerqué logré ver lo que ellos querían alcanzar. Eran botellas de agua colgadas de cordeles blancos. El árbol estaba repleto de ellas. Y la gente brincaba sin cesar. No supe si jugaban o de verdad tenían mucha sed, considerando que del cielo caían galones de agua que ellos no estaban dispuestos a recibir, o simplemente ignoraban. Fue cuestión de una fracción de segundo, porque íbamos a una velocidad considerable. Pero me dio tiempo suficiente para pensar que ésa sería una buena solución para los desiertos. Si los oasis son ingratos y se esconden, deberían poner de estos árboles ahí, y saciar la sed de los viajeros. Claro está, que deberían sembrar árboles de cordeles más largos que el que yo vi. Cuestiones de Logística.

Las piernas se me estaban durmiendo. Seguí manejando y entramos a un túnel en un monte. Dentro de él había focos dispuestos de manera periódica que guiaban el camino que debíamos seguir. Aunque, tratándose de un túnel, no había mucha opción. Mi papá seguía roncando. Estacionamos en alguna calle empinada. Ahora las calles estaban empedradas. Habían pasado ya varias horas. Recuerdo que en algún momento nos detuvimos para algo relacionado con trabajo. Y desde entonces había pasado ya un tiempo considerable. Teníamos hambre otra vez.

Ahora bien, no pretendo hacer publicidad al lugar. Al menos no de manera gratuita. Sólo diré que se llamaba el Mesón de la A. o mejor no, supongamos que se llama el M. de la Abundancia. El M. de la A. Sí, eso es. Nos sentamos. La mesera nos indicó que en ese momento no tenían pizza, no tenían nada con pollo. Sólo fajitas de res y pasta. Opté por la primera. Le pregunté en dónde estaba el baño, porque quería lavarme las manos. Seguí el pasillo que me había indicado. La luz del baño de hombres estaba encendida. Decidí esperar afuera por si a algún oportunista se le ocurría meterse en la fila. Mientras esperaba se acercó una pequeña niña con vestimentas muy folclóricas. No me atrevo a decir de qué región porque es muy probable que me equivoque. Le pregunté si podía sacarle una foto. A lo que ella contestó que me daría un regalo si no lohacía. Siempre me han gustado los regalos. De su pequeña bolsa tejida sacó un par de piedras color café. -Venturina- dijo. A mi se me hizo muy raro. -¿Que no la venturina era verde?-. -¿Porqué piensas eso?- dijo. - Bueno, pues porque empieza con "V"-. Aún así le agradecí y las guardé en mi bolsillo. Dijo -Ofrécelas con cuidado. Sólo si la persona correcta las tiene se podrán ver sus destellos a la luz del sol- y se fue. -Violeta- pensé, -también podría ser violeta-.

Quedé un poco confundido y pensativo, pero seguía hambriento. Regresé a la mesa y la comida ocurrió de un modo casual. Los cubiertos danzaban con la música que un par de jóvenes interpretaban sentados en el marco de una ventana. Nos sirvieron mucho de comer. Quedé más que satisfecho. Después de comer salimos del pueblo. Me pareció muy extraño que al llegar al otro lado del túnel por el que habíamos entrado, salimos en un lugar diferente. Arriba de un cerro, y tuvimos que viborear nuestro camino hacia abajo. Pasamos de bajada por un rancho llamado La Luz. Le mostré a papá algo que me sorprendió mucho. Era un caballo que jugaba volibol dentro del corral. Tenía dispuesta una red y parecía estar practicando sus saques. - Esto es muy extraño -, dije - ¡si en este lugar a todos les gusta el futbol!-.

Unas vías de tren pasaban a través de la calle. Las seguí con la mirada y me di cuenta de que llegaban hasta una casa. Hasta el tendedero estaba lleno de ropa. Lo bueno es que los trenes tienen esa chimenea que silba, porque así puede avisar a los habitantes que ya está cerca, y así ellos pueden abrirle la puerta para que pase, que éste no manche las sábanas que seguramente se estarán secando después de haber sido lavadas.

Inicialmente, iríamos a comprar pasta dental en un supermercado cercano, pero terminamos comprando dulces. Encontré una fábrica. Pero no me dejaron entrar. Me dijeron que sólo había acceso para personas que no estuvieran dormidas en algún hotel de la zona. Y que tal vez cuando estuviera despierto tendría la oportunidad. - ¡Pero si aquí estoy! - y abrí los ojos tanto como pude. - ¿Me deja pasar? -. El hombre cerró la puerta. No entendí muy bien lo que pasaba, pero me fui caminando al hotel. Se hacía de noche, ya no me dio tiempo de nadar. Y menos con ese frío, ¡si no estoy loco! Cuando llegué al hotel vi que la camioneta estaba estacionada frente a la recepción. Abrí la puerta y subí.

Tan pronto me acomodé en el asiento y me coloqué el cinturón de seguridad, papá comenzó a moverme el hombro y decía -ya llegamos-. Me bajé otra vez y entramos a la recepción. La tarde apenas estaba muriendo. Nos entregaron el control de la tele y la llave. El cuarto era el 113. Llegamos a instalarnos. Me dolía la cabeza. Vimos el monitor durante varias horas. Y no sé en qué momento en específico me quedé dormido.

A media noche salí a caminar un poco por el lugar. Traía mi traje de baño. Al fondo había una puerta desvencijada que decía lo siguiente: " Ciclopista. Úsese bajo su propio riesgo". Y ahí va el tonto. Tenía de largo aproximadamente un kilómetro y setecientos metros más de una pista completamente desgastada. A ambos lados había plantas muy altas, como las de la carretera. Pero en cierto modo tuve más miedo, después de la advertencia. Estuve esperando todo el tiempo a que alguna víbora saltase para propinarme un buen mordisco. Afortunadamente, éste ya se lo había dado a otro corredor que me encontré a mitad del camino. El no parecía notarlo, porque la llevaba prendida del talón y, así y todo, no disminuía su ritmo o su velocidad. Esa es buena condición física.

Las siete y treinta antes meridiano cuando sonó el despertador. Decidí bañarme lo más rápido porque la idea inicial era salir a la misma hora del día anterior. Cosa que, obviamente, no había respetado.

¡Increíble! La señora María Dominga nos preparó los huevos divorciados más ricos que he probado este día, sin mencionar que los únicos. Desayunamos en el mismo parador del día anterior.

No hubo gran novedad. El camino de regreso fue bastante tranquilo. Autos, cuotas y alguna parada ocasional al baño. Tuvimos que atravesar una ciudad por el centro, porque una pipa se había volteado en una curva y se había salido del camino. Ahí la vimos grande y ruedas pa' arriba. Que desperdicio. Pensar que se le iba a caer todo el tabaco. Rápido papá me corrigió y me dijo que era una pipa de agua. - Que incoherencia - pensé; pues todo el mundo sabe que si se moja el tabaco, éste ya no sirve.

De regreso, me tocó manejar el último trayecto a casa. Y así fue como llegamos a la ciudad otra vez. A la vida de todos los días. De pronto despierto y estoy aquí sentado contándote algo que no sé si soñé o inventé. Pero eso sí, te extrañé todo el trayecto. Tanto que no pude evitar notar lo que se forma si unes la primera letra de cada uno de los párrafos. Extraño ¿Cierto?

Así es como me fue en este viaje. La pasé bien.


notas de fondo: BT - See you on the other side

16/7/07

Hoy estoy muy contento

...y las palabras salieron al fin. Estoy tan feliz. Tal vez no son las palabras que esperaba. Tal vez divagué mucho tiempo. Pero estoy seguro de que dije lo que quería decir. Te quiero mucho! Y me da gusto que tengamos el valor de intentarlo. La verdad es que ya no podía esperar! Quería gritarlo a los cuatro vientos! Ni sueño tengo de la emoción! Sé que ahora viene lo bueno. Y si le echamos ganas hasta ahora, a partir de este momento debemos echarle el doble. Esto nos saldrá bien, ya lo verás...



TE QUIERO :)
notas de fondo:
- El sonido de la lluvia en la cima del mundo

15/7/07

Descanse en paz, Señor de las agujetas.

No pretendo hacer un estudio extensivo sobre la vida y la muerte, su interacción y sus efectos sobre nuestra percepción del mundo. Sólo quiero decir que es bastante extraña la manera en la que la manejamos.
Es decir, la muerte la tenemos siempre como algo de fondo. No creo que alguien se ponga a pensar en ella a diario; salvo los médicos forenses, los sepultureros y quienes se dedican a los servicios fúnebres en general. Mucho menos la desea, exceptuando a aquellos que tienen una vida miserable, pero creo que ni en ese caso desean morir, puesto que aún tienen la esperanza.
Hay gente que incluso la venera (en su propia retorcida forma) y le pide favores, le rinde tributo y todas esas cosas que se suelen hacer.
Y no sé porqué le tenemos tanto miedo, o respeto; pero más lo primero. Tal vez es un poco a cambiar las cosas que conocemos por otras que nadie ha vuelto a decirnos cómo son. Imaginen a las personas que viven de acuerdo a sus agendas. Tener que mover todas sus citas porque no saben lo que encontrarán del otro lado; y todas las citas que deberán reprogramar - ...no, el miércoles me es imposible, licenciado. El martes paso a mejor vida . - También podría ser que tenemos temor a extrañar a todas las personas que conocemos aquí y que es a quienes estamos acostumbrados. Como escribió García Marquez: " sólo entonces recordé que el morir es no estar nunca más con los amigos".
En fin, sólo quiero decir que la muerte y la vida, si las vemos como algo colectivo, son algo cotidiano, algo de todos los días. Pero cuando se nos ponen enfrente, cualquiera de las dos, se siente cien veces o mil más que si lo oyes en el radio o si te enteras por televisión.
Estoy divagando, todo esto se debe a dos cosas que sucedieron estos días. La primera: te volviste tía; postiza, pero tía a fin de cuentas. Es difícil de imaginar la reacción de la hermana de tu amiga ( se entendió la relación?) cuando por fin pudo ver al bebé que recientemente había salido de ella. Es un amor que se va formando durante nueve meses y se consolida en el momento en que se postra la mirada sobre el pequeño. Es amor a primera vista, el amor incondicional de madre, el más grande, fuerte y subevaluado de todos. Con esto trato de entender la vida que, aunque ya estaba dentro de un vientre, abre los ojos por vez primera a este mundo. Con un valor incomparable, pues cuando se es niño no se tiene miedo a nada. Eso, y una inocencia total, pura.
Justo al día siguiente. Me encuentro a muchas personas reunidas en la siguiente cuadra. Se me hizo extraño puesto que ese día no había futbol (que está en voga estos días). Y mucho menos se ve el partido a la mitad de la calle. Nunca me ha gustado ser entrometido. Me regresé a la tienda. Más tarde llegó mamá y me dijo que había una ambulancia. Que un señor yacía tendido en la calle. Había muerto. Según supe en ese momento, se trataba del señor que siempre vende (vendía?) agujetas frente a la mueblería. Increíble, he pasado muchas veces por ahí, y recordaba a la perfección las agujetas. Las rojas a la izquierda y las verdes enmedio. Debajo de todas estaban siempre las blancas. Al señor, no lo recordaba en absoluto. Me dí cuenta de que si no lo veía en ese momento, tal vez ya nunca sabría cómo era. Porque nunca me había tomado un momento para verlo. Decidí ir a ver. Efectivamente, ahí estaba. Tirado en la calle y sin sábana que lo cubriera. Lo recordé entonces. Era como siempre había sido. Hacía un calor espantoso y nadie se preocupaba por quitarle la chamarra. No se le veía golpeado, ni sangraba, ni nada. Según lo que pude escuchar, había sufrido una hemorragia interna que había ocasionado que se desplomara de un momento a otro. No puedo imaginar tampoco la impresión para la gente que estaba cuando esto sucedió. Porque así sucede, de un momento a otro se te acaba, y ahí nos vemos. No pude evitar sentirme afortunado, porque esa tarde se habían tirado los dados, y me salvé tan sólo por una cuadra.


Desde aquí le envío un saludo, señor, esperando que de verdad esté en un lugar mejor...


notas de fondo:

- bloodycrooks - rola4
- arctic monkeys - only ones who know
- the flaming lips - yoshimi battles pink robots

12/7/07

Tengo sueño...

Ya me di cuenta de que no importa qué tan temprano se levante uno. O que tan bien se planée un día. Es muy difícil prevenir el humor, la lentitud o simplemente a las personas ineptas. Desde ayer en la noche me preparé para comprar unas cosas que tenía pendientes. Estuve en la puerta del proveedor a las 9 en punto de la mañana. Y no pude salir sino hasta pasado el mediodía. ¿La dimensión desconocida? Nada! Iba solo por dos bobinas de cable y me tomó toda la mañana. Ya me estaba arrancando el poco cabello que me queda! Pero así sucedió. No importa, el tiempo que perdí ahí nunca volverá.


Algo bueno que sucedió el día de hoy. Mi pie se deshinchó y puedo caminar de nuevo. Parece que los jalones funcionaron. Aun no me repongo al cien, pero seguramente podré volver a hacer ejercicio mañana.

Vi el partido de la Sub-20. Esperaba que ganaran y así lo hicieron. Después de todo, jugaban contra la selección de Congo. :S Ya si no ganaban era porque de plano!

El día estuvo muy tranquilo. Fuera de eso no hubo mucho. Ah! acabo de recordar que no lavé el auto! Ahora mañana.


Hablé contigo. Ya tengo muchas ganas de verte; pero me aguanté hoy porque como puedes ver el día fue un caos. Al menos hasta las cuatro de la tarde. Pensé que estarías más atareada. Pero , lo bueno que ya tienes todo calculado ja. Y de aquí al lunes se me hace ya poco. Te quiero, Te querré en la mañana, y seguramente el lunes también. No hay problema... pero si debo decir algo: Ya te quiero abrazar!

Ja, hoy estoy muy simplón para escribir. Pero ya es tarde (para mí), y no pude escribir antes porque estaban usando mi computadora para trabajar. Imagínenlo, trabajando a estas horas. Eso es como inmoral. Pero bueno, yo por hoy ya. Muchas gracias y pidos!


notas de fondo:

- The flaming lips - The Supreme Being teaches Spiderman how to be in love
- Incubus - The warmth
- Mew - Quietly

11/7/07

La oreja, el pie y Sánchez.

Estaba viendo las noticias en la mañana y me pareció muy gracioso darme cuenta que ahora Chichén Itzá, recientemente nombrada maravilla moderna del mundo, tiene dueño. Su nombre: Fernando Barbachano. Aparentemente, quieren hacer la donación de estos terrenos al país para que los organismos correspondientes se encarguen de su restauración y manutención. Así como preparar el sitio arqueológico para el muy posible incremento en el turismo a este lugar, debido todo a su nueva naturaleza.

Esperemos que esta donación sea completamente altruista y no sólo una búsqueda de fama por parte del señor. Por otro lado, debemos de reconocer su discreción durante el periodo de las votaciones mundiales, puesto que un escándalo o al menos un pequeño disturbio hubieran alejado los ojos de los jueces de nuestro patrimonio cultural como uno de los candidatos (Que pudiera tener algo que ver,no sabemos que tan transparente sea este asunto).Sigamos con atención lo que sucederá a partir de ahora.

En segunda instancia, Argentina dejó fuera a nuestros once tricolor. Lástima, tenía grandes esperanzas. no sé porqué el técnico nacional metió en la portería a Sánchez. Fíjense en el gol de Messi: ¿les recuerda a algo el mundial del año pasado? ¿Alguien podría explicármelo? Ni hablar muchachos, vamos por el tercer lugar.

Hoy en la mañana fui a revisarme el pie. Tuve muchos problemas para dormir a causa del dolor, así que disfruté de un sueño intermitente que me dejó completamente cansado. Aparte de esto, no podía caminar bien esta mañana, me dolía demasiado el tobillo. Logré llegar al consultorio del señor (cuyo nombre desconozco) huesero. Ya había ido alguna vez pero, no recordaba que fuera tan doloroso. Debo confesar que solté un par de alaridos cuando presionó su mano contra mi tobillo. Es increíble que todavía me haya cobrado, si me dolió más que nada! Yo debería haberle cobrado la consulta, pues creo que muy posiblemente esto le ayuda a desestresarse viendo a la gente retorcerse de dolor. No es divertido. Pero vale la pena. Así que de buena gana pagué. Ahora puedo caminar otra vez. Tal vez no correr ni hacer mucha fuerza, pero algo es algo. Además, de regreso, en la esquina pasé a la panadería ( de esas que siempre huelen bien ) a comprar una oreja para celebrar mi valor y no haber optado por la salida fácil y tardada ( voltaren, vitacilina, etcétera).

El resto de la tarde, normal. Llovió menos de lo que ha llovido el resto de la semana. Salió un pedido de última hora, mañana me toca madrugar. Tenía ( y aún tengo) muchas ganas de verte, pero el tiempo no siempre me favorece cuando se trata de hacer muchas cosas el mismo día. Además, ahora sé que andas ocupada, y prefiero no retrasarte con tus cosas :S . Calma, ya tendremos tiempo, ¿o no? Hay un lugar al que quiero llevarte...
notas de fondo:
- Erroll Garner - I'm in the mood for love
- Bloc Party - Pioneers

10/7/07

Pero que buen baile...

El día ha ido mejorando considerablemente. Todo empezó esta mañana cuando tenía que ir al centro y estar a las ocho de la mañana comprando material. La verdad es que no pude dormir muy bien. Estaba pensando en muchas cosas. Pero en fin, me levanté tarde ( como siempre) y me bañé ( como casi siempre) para salir al cuarto para las ocho de mi casa. Ni tiempo me dió de desayunar.
A la altura del Monumento a la Madre, encontré el campamento de los maestros, o campesinos, o maestros campesinos que a lo largo de un mes ya ( o algo así) han embellecido el Paseo de la Reforma con sus cuerpos desnudos y sus cartulinas de protesta. La primera vez que los vi ahí, pensé que Spencer Tunick había vuelto y enseguida busqué un lugar para estacionar el auto y unirme a ellos. Sin embargo, al leer sus letreros decidí mejor seguir de largo como si nada hubiera pasado. Ni siquiera me tomé la molestia de recoger mi zapato izquierdo, que ya me había quitado, de la pura vergûenza que sentí.
En fin, este día agradecí a las fuerzas superiores que por el frío que aún hacía a esa hora. Pues este grupo de señores y señoras decidió no ponerse ( ¿o quitarse? ) su acostumbrado uniforme de protesta. Algunos traían un suéter y otros incluso traían pantalones. Aunque de tantas veces que he pasado ya, podría decir que reconozco a dos o tres de ellos (por sus rostros, no vayan a malpensar).
Compré el material. Se me hizo tarde en exceso, estaba levantando las cortinas del local una hora y media más tarde de lo establecido en el horario de atención ( para los que no lo saben es una tienda de material eléctrico, donde he pasado la mayoría de mis vacaciones desde hace cuatro años, pero esa es otra historia) . Las mismas fuerzas a las que agradecí un par de horas antes decidieron cobrármelas ahí mismo. Enseguida entró un señor que quería comprar manguera. Por dentro quería llorar. Nunca me ha gustado vender manguera, se hace toda como una tripa saltarina y se enreda y en realidad te hace pasar un rato desagradable. Traté de apurarme a medir los treinta metros que quería y se los di. Justo cuando crees que todo temrina, ahí yace en el suelo el resto del rollo esperando a que lo enredes de nuevo y lo pongas en su lugar y pasar un mal rato de nuevo.
Las ventas han ido mejorando. Eso me alegra, los días en que no tengo que hacer me aburren en demasía. Así se me pasa la jornada más rápido.
A media tarde llegó un proveedor de material de aluminio que nos habían pedido el sábado. Estaba repleto. Pero esas piezas eran demasiado grandes como para guardarlas en nuestra bodega y muy grandes también para llevarlas en la camioneta. Decidí subirme al camión y pedirles a los gentiles señores con cara de rufianes que me acompañarán a entregarlo de una vez y así salir del problema : "al cabo que ya está todo amarrado, ¿no?". No se veían muy convencidos, pero accedieron al final.
Decidí ensuciarme un poco y los ayudé a descargar el camión. ¡En verdad eran muchas cosas! A la mitad ya me cansé y me puse a platicar con el encargado. Resulta que la empresa se dedica a hacer todos los muebles que vemos en los supermercados del pelícano. Ya saben, donde están los pescados, los pollos rostizados,etcétera. Si no sabe cuáles son, los invito a que los vean. Son de acero inoxidable. y me reveló el secreto de fabricación de las mesas frías (como les llamaba) de sushi. La verdad es que como soy tan distraído no recuerdo a lo que me dijo. Solo algo de que se le ponían capas y capas de alguna cosa para mantener la temperatura.
Regresé de entregar a la tienda y me hicieron una llamada. Hay un grupo de amigos que se reúnen cada semana a jugar futból en un deportivo que está muy cerca de casa. Me dejaron salir temprano del trabajo con la condición de llevar a mi mamá a "comprar la leche". Siempre dice eso, pero ya sé que eso significa comprar todo lo que hace falta y algunas veces hasta lo que no hace falta y dar vueltas interminables por los pasillos.
Llegué justo a tiempo para empezar el partido. Esta vez fueron algunos elementos más jóvenes. No entraré en detalles. Solo diré que tuvieron suerte. Nos ganaron apenas como por treinta goles. Me torcí los pies. Pero estaba muy contento.
De regreso a mi casa empezó a llover. Estuvo bien, aunque ahora tengo dolor de cabeza y de pies. Ya me bañé. A ver si no me enfermo, por andar de loco y de enamorado. Yo creo que me voy a dormir temprano. Porque ya tengo sueño.
A ver qué nos espera mañana. Mucha emoción, de seguro. Ya no puedo esperar.
pd: ya hablé contigo. yo creo que por eso estoy de mejor humor... me hacía falta de veras.
notas de fondo:
- incubus -make yourself
- snow patrol - signal fire

9/7/07

El cumpleaños del charal

El día de hoy la pasé muy bien. Fuimos al cumpleaños del Charalito y comimos pozole y vimos una película que me encanta. El príncipe de Nueva York... o Un Príncipe en Nueva York.. la verdad no recuerdo bien el nombre. El chiste es que la película es de mi agrado en gran medida. Pensé que no lograría escapar del trabajo, pero ocupé muy bien la mañana para hacer todos mis pendientes. Logré terminar para el mediodía. Después de eso corrí a toda velocidad al Batimóvil para ir al lugar del encuentro. Así estuvo. La verdad es que cuando estás ocupado el tiempo pasa muy rápido. Debo decir que regresé cinco pesos más pobre porque perdí mi parte de la apuesta en el Jenga. Quiero creer que quedé cerca, cuarto lugar no es tan malo. Después de todo, eramos ocho jugadores. Corroborando mi status de ciudadano promedio.

Me doy cuenta de que en el mensaje anterior no di la bienvenida a este espacio. Lo siento. Bienvenido, bienvenida, bienvenidos. Aquí no pretendo herir los sentimientos de nadie. Pero entiendan que ésta es la manera en que puedo decir las cosas. Aunque los que lean a lo mejor saben quién soy: ja, asi se pierde un poco el misterio y la ilusión de que todo esto es una invención.

Aún estoy un poco preocupado. No has llamado. Espero que estés muy ocupada. Lo siento, sé que soy demasiado preocupón y debo intentar dejar de ser así. Pero la verdad un mensaje de " no me hables hasta la próxima semana" me ayudaría mucho más que este tormentoso silencio. Descansa. Espero verte pronto. No olvides que te quiero.

Me voy a dormir. Mañana de nuevo me toca andar como loquito. Pero mejor estar así que hacer nada.



notas de fondo:

the flaming lips - do you realize?
the flaming lips - mr. ambulance driver
snow patrol - headlights on dark roads

¿...porqué?

...solamente me pregunto.. ¿porqué carambas no has llamado? te estoy extrañando con todas las de mi alma...





las notas de fondo: starsailor - fever